San Lorenzo como viene sucediendo reiteradamente, es dueño del trámite y maneja el balón durante gran parte del partido, pero también tiene o sufre algunas distracciones defensivas que le cuestan dolores de cabeza.
El conjunto de Boedo -al igual que con Sarmiento- arrancó perdiendo porque a los 8 minutos, luego de un tiro libre a favor para El Ciclón, quedó mal parado y de contragolpe el visitante se puso en ventaja.
Beligoy le perdonó la vida a Toledo -le pegó sin pelota a Buffarini- e increíblemente le sacó amarilla a los dos cuándo era roja para el delantero de Vélez. Esa amarilla mal sacada al cordobés lo llevó a ser expulsado minutos después.
Luego de dar vuelta el resultado (2 a 1) con un penal dudoso que Buffa convirtió en gol, el conjunto de Guede "se durmió" y el equipo de Liniers empató luego de otro contragolpe que volvió a agarrar mal parado a San Lorenzo. Era un impensado 2 a 2 cuándo parecía que el partido estaba controlado.
El Ciclón salió a buscar el triunfo empujado por los casi 40.000 cuervos que llenaron el "Gasómetro" y a los 42 minutos, tras una gran jugada de Blandi, que sacó del área a Aguerre tiró un centro perfecto a la cabeza de Matos y el goleador no falló. Puso de cabeza el justo 3 a 2 para que San Lorenzo gane y llegue a la punta de la zona 1 del torneo.
Otro triunfo y ahora a pensar en la Copa Libertadores.
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