UNA LOCURA GENERAL

La gente de San Lorenzo esta ansiosa y desesperada por conseguir una entrada para presenciar la Final de la Copa Libertadores.
Las colas son interminables en busca de poder conseguir un lugar en el momento mas importante de la historia futbolística del Ciclón y hace lo que sea para decir presente.

Se sabe que el estadio va a quedar chico (se habla de 50.000 espectadores) y se estima que la recaudación estará alrededor de los 8.000.000 de pesos y por tal motivos empiezan a surgir posibilidades: el presidente habló de tribunas tubulares en el codo que une a la popular visitante con la Platea Norte.
Otros dicen que se podría "construir" las tribunas tubulares debajo de la Sur.
También otros opinan que lo mejor sería poner pantallas gigantes (como en el mundial, al estilo Fan Fest), en el polideportivo de Marmol y Salcedo o en Av La Plata, o en el Gimnasio San Martín de la Ciudad Deportiva, para tratar de descomprimir.
Todo sea por estar presentes en este momento histórico del club.

Mientras tanto, los hinchas siguen acampando en Boedo en busca de un ticket que les permita estar, pero a medida que pasan las horas, la desesperación empieza a hacerse notar.

Anoche cuándo empezaron a llegar los micros de Paraguay y los hinchas se enteraban que la mayoría de las entradas estaban agotadas, también se vieron rostros de fastidio.

Lo concreto es que para este partido se necesitaría un estadio para un millón de personas y eso es imposible.
Cada hincha jugará "su" final como mejor pueda, pero hasta que no cuelguen el cartel de "Entradas agotadas" la ilusión de poder estar va a seguir intacta.

GUSTAVO BENNASAR