Partido de vuelta por los octavos de final de la Copa Libertadores, y un resultado que favorecía al Ciclón por 2 a 1, logrado una semana antes en el "Nuevo Gasómetro".
Las 60.000 personas que estuvieron presentes, jamás podrán olvidarse de lo que para muchos fue una de las tres grandes hazañas en la historia de la copa.
Arrancó parejo el trámite, pero con el correr de los minutos se le empezó a complicar al conjunto azulgrana.
El árbitro Pezzotta fue protagonista principal cuándo ignoró una terrible patada de Falcao a Méndez, el cuál quedó afuera del partido.
River en ventaja por 2 goles (uno de ellos lo marcó Abreu).
San Lorenzo con 2 hombres menos, producto de las expulsiones de Rivero y Bottinelli.
Todo indicaba que el conjunto de Ramón se despedía del torneo en octavos, pero......
San Lorenzo empezó a dominar futbolística, territorial y mentalmente al equipo de Simeone.
Lo puso contra las cuerdas.
El aliento de los mas de 8.000 hinchas del Ciclón, hacían que los 50.000 de River estuvieran mudos y que fueran actores secundarios de lo que se estaba por venir.
Bergessio se convirtió en el "Súper Heroe" de Boedo, y puso el empate con 2 tantos inolvidables para el pueblo cuervo.
Después el "silencio atroz", el tirar pañales, el tirar maíz, por parte del hincha de River, no hicieron mas que darle la dimensión justa de lo que se había gestado un 8 de mayo de 2008.
Señores, han pasado 2 años de la histórica noche en Nuñez, pero estoy seguro, que con el paso del tiempo, se convertirá en leyenda.
GUSTAVO BENNASAR
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