Tuvo que llegar Caruso Lombardi para enderezar este barco que desde un primer momento se notaba que no tenía capítán.
Volviendo a la tarde de hoy, nuevamente el Gasómetro, estuvo repleto con 40.000 "cuervos" que volvieron a demostrar que es la hinchada mas fiel del fútbol argentino.
La permanencia en la "elite" del fútbol, El Ciclón la logró el jueves en el triunfo por 2 a 0 en Córdoba. Entonces hoy San Lorenzo sabía que tenía una ventaja considerable ante un equipo al que se lo apunta por faltarle "algo" a la hora de las definiciones. Y el once de Caruso fue el mismo que pisó Alta Córdoba en el encuentro de ida. Romagnoli al banco.
Y el primer tiempo fue bastante parejo, con algunas llegadas de la visita pero con las mas claras para el conjunto de Boedo.
En el segundo tiempo, con más espacios, el San Lorenzo pudo liquidarlo. Bueno tuvo un mano a mano tras un rápido contraataque, pero Chiarini tapó el balón.
Cuando las tribunas del Gasómetro eran una fiesta, y los hinchas azulgranas creían que la tarde de domingo iba a pasar sin sufrimiento, apareció Lagos y con el pecho puso en ventaja a la visita.
Fueron los minutos "dramáticos" de la tarde. Pero fueron sólo unos pocos minutos.
A los 33, Julio Buffarini se escapó por la derecha y asistió a Kalinski, que fue bajado de atrás por Osvaldo Barsottini.
Penal para el Ciclón y Néstor Ortigoza, la clavó en el ángulo derecho para el 1-1.
Ahí si ya no hubo tiempo para mas. Los 40.000 "cuervos" empezaron a delirar y a desahogarse de todos los males sufridos en estos 12 meses. Se acordaron del presidente -no de la mejor manera- y de la Promoción, con el famoso hit: "La Promoción, la Promoción, se va a la puta que la parió".
Y así finalizó la tarde, sabiendo que San Lorenzo está en dónde debe estar, en la Primera División del fútbol argentino, por mas que a muchos no le guste ni un poquito.
GUSTAVO BENNASAR
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